Cuando se presenta una inflamación en determinado órgano o tejido del cuerpo, significa que hay un problema. Desde una faringitis hasta determinado tipo de cáncer: gran parte de las enfermedades se expresan mediante una inflamación.
Hay maneras de reducir el riesgo de sufrir inflamaciones. Según la Escuela Médica de Harvard, una alimentación inteligente influye en este aspecto. Los expertos, de acuerdo a un informe publicado recientemente, recomiendan el consumo de aceite de oliva, tomates, vegetales de hojas verdes, pescados azules y frutas, pues ayudan a combatir la inflamación. Por otra parte, sugieren disminuir el consumo de frituras, bebidas gaseosas, carnes rojas, harinas refinadas y otros alimentos que favorezcan la inflamación.