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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

alevy@ambiand.com

Al 14 de octubre, transcurrido un mes y medio del inicio del año hidrológico, periodo que desde el 1 de setiembre al 31 de agosto utilizamos para contabilizar las lluvias en el Perú, estas se muestran notoriamente débiles.

A la fecha se debería recién haber avanzado entre el 4% y 5% de lo que va a llover en todo el año hidrológico. Aún es una muestra poco representativa. Sin embargo, no viene bien.

En AMBIAND tenemos un sistema de monitoreo de lluvias, medidas por satélite, sobre 105 macrocuencas que constituyen todo el mapa peruano. Las 105 lucen deficientes.

Estamos recibiendo noticias de incendios forestales en Machu Picchu, Tarma y en muchos otros lugares que reflejan la poca presencia de lluvias.

El Niño es –muchas veces– un productor de sequías en la sierra sur y parte de la central. Ya tuvimos amargas experiencias en los años 1983 y 1992.

Ambas experiencias produjeron impactos importantes en la producción agrícola, ganadera y energética del país, con el agregado de racionamientos en los servicios de agua potable en más de una ciudad.

Vamos a seguir monitoreando esto de cerca porque las implicancias son enormes.