Alianza Lima empató 3-3 con Melgar por semifinales del Descentralizado. (Fernando Sangama / GEC)
Alianza Lima empató 3-3 con Melgar por semifinales del Descentralizado. (Fernando Sangama / GEC)

Se hizo esperar la semifinal. Desde inicios de noviembre se sabía que iban a jugar Melgar y Alianza Lima. Después del partidazo en Matute, está claro que valió la pena la espera. Cambiante, emocionante, dramático, buen jugado por momentos, mal defendido en otros. Este jueves en Arequipa debería ser otro muy buen encuentro.

Más que nunca es clarísimo que el partido se divide en dos partes. Hasta el 0-3 a los 20 minutos del segundo tiempo, todo era de los arequipeños. Jugaban a placer, goleaban y dominaban. Encontraron los espacios en el medio para imponer su buen pie. Con Joel Sánchez, Christofer Gonzáles, Bernardo Cuesta y Alexis Arias en gran nivel. Además, lograban ser efectivos y parecían tener todo listo para asegurar la serie en su casa.

Hasta que Pablo Bengoechea decidió arriesgar. Tres al fondo, entraron Óscar Vílchez y Maximiliano Lemos. En una de las primeras que toca ‘Neka’ mete un buen centro que Hohberg pivoteó para Affonso para el descuento. Vílchez no puede faltar en este Alianza. Une líneas, hace jugar a los demás. Lemos, además, mete buenos centros, no solo pelotazos al área. El del tercer gol de Fuentes es un gran ejemplo. Lo terminó empatando con mucho empuje, ganas, imponiéndose en las divididas pero, además, con juego y ganando el mediocampo, que lo había perdido durante todo el partido.

De esta manera, todo queda abierto para la revancha. Alianza queda fuerte desde lo anímico, pero se tiene que animar Bengoechea a salir a jugar ofensivamente. Melgar sumó de visita y debe construir sobre lo que hizo bien. Juega en casa y eso lo debería aprovechar, pero no hay nada dicho. Partidazo el del jueves.