Hasta el 2016

Más de un analista considera que la degradación del actual gobierno no da para más, y –en dicha línea– ponen en consideración la aplicación del artículo 114 de la Constitución vigente (léase, la vacancia presidencial por incapacidad temporal).

No sabemos si en relación a dicha propuesta o con carácter preventivo, el Sr. Isaac Humala, padre del presidente Ollanta Humala, sostuvo recientemente que mantenía "la esperanza" de que su hijo dé una suerte de "autogolpe" y restablezca la Constitución de 1979.

Como vemos, la suerte de nuestra democracia no pinta bien para los extremos. Ambos, en todo caso, deben ser repudiados y con justa razón.

No es posible que, a pocos años del bicentenario, seamos incapaces de mantener la estabilidad democrática más allá de los tres periodos. Tendríamos que remontarnos al siglo XIX para encontrar un episodio de transiciones democráticas (siempre, claro, con pequeños guiños de interrupción). Y si en el pasado la estabilidad política y el respeto a las instituciones básicas eran un bien menospreciado, hoy son pieza fundamental del desarrollo de toda nación.

Quienes creemos en la democracia y en la necesidad de fortalecer nuestras instituciones debemos hacer todo lo posible, todo lo que esté a nuestro alcance, para protegerla de ambos extremos.

Por supuesto, nada convalida que hoy se plantee la vacancia presidencial, y esperamos (y creemos) que tampoco esté en la agenda del vértice del poder hacer algún giro de dicho tipo. Valgan verdades, tampoco están las condiciones dadas para que ello ocurra: la popularidad del mandatario, cercana al 28%, es insuficiente para que la calle lo acompañe, como tampoco existe un pretexto creíble que lo avale. Si, en efecto, quisieran hacer algo en esa línea, no imaginamos a las Fuerzas Armadas brindándole soporte, y –más bien– sí sería fácil imaginar la reacción del pueblo en calles y plazas.

Vistas las cosas, es una locura, además de un error garrafal, poner estos temas sobre la mesa. Esperamos, por ello, que el debate se mantenga en los estamentos institucionales, y lleguemos al traspaso democrático del 2016.

Juan José Garrido director@peru21.com