Fritz Du Bois,La opinión del directordirector@peru21.com
Lo que teníamos hasta octubre –cuando la revocatoria fue convocada– era un gobierno municipal sin brújula y sin nada positivo que mostrar por los casi dos años que llevaban a cargo.
Ahora han reaccionado luego del shock por el temor a ser revocados habiendo firmado diversos contratos de concesiones y tomado decisiones que evadían en el pasado, desde el ordenamiento del tránsito hasta la ampliación del horario del Metropolitano. Así que a todos aquellos que hablan de golpes de Estado para referirse a las revocatorias, habría que señalarles el impacto que ha tenido en una administración municipal que sufría de una parálisis monumental hasta el día que el proceso fue convocado, esperamos que no vuelvan a su estado anterior si no son revocados.
En todo caso, las revocatorias se han consolidado como un valioso mecanismo para que los ciudadanos fuercen a los políticos a trabajar y lograr resultados.
Por otro lado, el gran perdedor ha sido el Jurado Nacional de Elecciones, entidad que no ha logrado dar correctamente ni un solo paso. Primero, ha demostrado una ineficiencia abismal para fiscalizar los financiamientos de las campañas; estamos seguros de que nunca conoceremos ni los montos gastados ni los aportantes reales en ambos campos. Sin duda, muchos narcos ya lo habrán notado.
Además, fueron incapaces de organizar adecuadamente un simple debate. Pero el premio mayor burocrático se lo lleva el que requieran 8 meses para convocar elecciones si el concejo es revocado. Los venezolanos llaman a una elección presidencial en 30 días; a nosotros elegir a un alcalde nos toma casi un año. Es un escándalo, el Jurado tiene que ser reformado y modernizado.