Las cremoladas se han convertido en los últimos años en uno de los postres helados favoritos durante el verano.
Su preparación es sencilla, pues básicamente es un jugo congelado que luego será batido. Entonces, los insumos serán las frutas, agua y azúcar.
Un negocio que recién empieza requerirá de un mínimo de dos congeladoras, una donde se realice la preparación, y otra para la exhibición y venta al público.
CONGELAR Y BATIRUna vez preparado el jugo, este se pone a congelar (a entre -18 y -20 grados bajo cero) y cada cuatro o seis horas se bate el hielo que se forma. El procedimiento se repite tres veces hasta obtener la consistencia esperada.
Esa es la forma artesanal de preparar la cremolada para los negocios que recién empiezan.
Pero una vez que la empresa está consolidada puede adquirir máquinas modernas que aceleran los procesos, refiere Edwin Jaúregui, fundador de Cremoladas Yayo, que desde hace 25 años es un punto de referencia en Breña.
Esta empresa cuenta con torres de enfriamiento y un sistema de batido. «Nosotros colocamos el jugo y en ocho minutos ya tenemos la cremolada lista», subraya Jáuregui, que en verano llega a vender dos mil vasos al día.
VERSIÓN LIGHTLa preparación requiere de un alto nivel de azúcar, pues al congelarse el jugo baja la intensidad del dulce.
Pero la empresa también puede preparar una línea light, anota Jaúregui.
Se pueden ofrecer diversidad de sabores. Los favoritos son fresa, lúcuma, mango, maracuya y coco. Pero cada vez surgen nuevas alternativas como las cremoladas de aguaje, aguaymanto, camu camu, etc.
Recuerde solicitar el permiso sanitario necesario.
DATOS
– Personal. Se requiere de una o dos personas para empezar en ese negocio.
– Beneficio. Las frutas logran mantener sus propiedades de ayuda a la salud.
