Los ministros de Finanzas de las 20 principales economías del mundo decidieron aprobar un paquete de medidas para combatir la evasión fiscal corporativa y respaldar las propuestas delineadas por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), las cuales apuntan a modificar las normas sobre impuestos que gravan las ganancias obtenidas del comercio internacional.
RAZONESLa erosión de la base imponible y traslados de beneficios (BEPS) ha permitido que las empresas saquen ganancias del país donde obtuvieron el dinero y las lleven a jurisdicciones como Irlanda, Luxemburgo o las Bermudas, donde esas utilidades no tienen ningún gravamen.
La OCDE ha estimado entre US$100 mil millones y US$240 mil millones anuales la cantidad de dinero no gravado de las compañías que trasladan sus ganancias a paraísos fiscales.