Redacción PERÚ21

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Virginia Woolf es la protagonista del 'doodle' de este jueves. El buscador recuerda así la fecha de nacimiento de una de las escritoras más importantes del modernismo anglosajón del siglo XX y también del feminismo internacional.

Nacida en Londres el 25 de enero de 1882, Woolf fue una figura significativa en la sociedad literaria de Londres y un miembro del grupo de Bloomsbury en el periodo de entreguerras. Los seguidores de sus obras señalan que una de ellas, 'Fin de viaje', podría ser la novela más importante de su vida, la cual tardó en publicar 8 años.

Su técnica narrativa rozaba lo poético y se basaba en el monólogo interior, con el que exploraba aspectos de su propia vida, y su forma de escribir fue siempre algo experimental, buscando siempre la identidad de personas sensibles y nostálgicos.

Virginia Woolf, fotografiada por su marido Leonard en Monk's House en 1932 (ABC)
Virginia Woolf, fotografiada por su marido Leonard en Monk's House en 1932 (ABC)

Sus hermanos la llamaban cariñosamente "the goat" (la cabra) y todos tuvieron una educación en casa impartida por tutores. Crecieron en un ambiente frecuentado por artistas, literatos y políticos, y con una biblioteca que era considerada el gran tesoro del hogar.

Sin embargo, la complejidad de la vida de Virginia vino dada porque además de sus hermanos tenía tres hermanastros, hijos del primer matrimonio de su madre. Todo indica, y así lo reflejó de manera velada y autobiográfica en una de sus obras, que tuvo que soportar abusos sexuales de dos de ellos y que jamás pudo superar la desconfianza hacia los hombres, decantándose por una inclinación romántica por las mujeres.

En 1929 publicó un ensayo feminista, 'Una habitación propia', realizado a partir de las conferencias que había impartido en universidades de mujeres, y en el que examina el papel femenino en la literatura. En 1931 publicó 'Las olas', considerado por la crítica como uno de sus mejores libros.

Un ícono

Virginia Woolf padeció lo que hoy se conoce como trastorno bipolar y tras finalizar la novela 'Entreactos', se vio incapaz de trabajar. Además, junto al estallido de la II Guerra Mundial, la destrucción de su casa de Londres por los bombardeos de la Alemania nazi y el escaso éxito de la biografía que escribió de su amigo Roger Fry, se suicidó. 

Precisamente es eso lo que deja la lectura de su obra póstuma, la inutilidad de la existencia. Los efectos devastadores de la contienda la sumieron en graves depresiones.

Llenó los bolsillos de su abrigo de piedras y se metió en el río el lado de su casa y se ahogó. "Siento que voy a enloquecer de nuevo. Creo que no podemos pasar otra vez por una de esas épocas terribles. Y no puedo recuperarme esta vez". Así se lo dejó escrito a su marido Leonard Woolf.

Con ocho novelas escritas y más de una treintena de libros de otros géneros, la escritora muere en 1941, defendiendo los derechos de las mujeres a través de sus textos. Hoy cumpliría nada menos que 136 años.

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