Cuando el joven venezolano Leocer José Lugo Maíz (19) fue hallado el escenario era atroz. Le habían amputado las manos, le cortaron la lengua y le sacaron los ojos. Medios locales indican que se trata de un soldado declarado como desertor.
Las primeras investigaciones señalan que él permanecía en la mina Yin Yan en El Callao al sur del estado Bolívar. Al parecer, el sitio fue atacado por sujetos que cometieron el indignante crimen.
Según el El Nacional de Venezuela, el joven era un soldado perteneciente al contingente septiembre 2018, plaza del 642 BINGF. Sin embargo, estaba ausente de las instalaciones desde el 28 de diciembre de 2018 y fue declarado “presunto desertor” el primero de enero de 2019.
Funcionarios militares lo llevaron hasta el hospital Dr. Juan Germán Roscio donde permanece en observación.