Como medida a beneficio de la regulación antimonopolio, la Unión Europea impuso este martes una multa récord de 2,420 millones de euros contra Google por alterar los resultados de las búsquedas online.
Según la Comisión Europea (CE), el gigante de internet "dio un lugar destacado en sus resultados de búsqueda solo a su propio servicio de comparación de compras, mientras relegó a servicios rivales", situación que "sofocó la competencia basada en los méritos de los productos en el mercado de comparación de precios".
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"Ha negado a otras empresas la oportunidad de competir sobre la base de sus méritos y la innovación", señaló Margrethe Vestager, comisaria europea de Competencia. "Y lo que es más importante, ha negado a los consumidores europeos una verdadera elección de servicios y los beneficios completos de la innovación", acotó.
La CE determinó un plazo de 90 días para que la compañía estadounidense controle su conducta; caso contrario Google recibirá una penalización de hasta el 5% de los ingresos diarios medios mundiales de Alphabet, matriz de la compañía.
De esta manera, la sanción por el comportamiento anticompetitivo de Google se convierte en la mayor multa impuesta a una sola compañía.