Al menos siete personas murieron, entre ellas importantes dirigentes deportivos, en un atentado suicida perpetrado por una mujer en el Teatro Nacional de Mogadiscio, la capital de Somalia.
Entre los fallecidos figuran los presidentes del Comité Olímpico de Somalia, Aden Yabarow Wiish, y de la Federación de Fútbol de Somalia, Said Mohamed Nur.
El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, y el de la FIFA, Joseph Blatter, dijeron hoy que estaban en estado de "shock" por las muertes de Wiish y Nur. "Quiero rendir homenaje a sus inmensos esfuerzos para promover el deporte. Sus muertes nos dejan una gran tristeza", manifestó Blatter.
En el acto se celebraba el primer aniversario de la televisión nacional y participaba el primer ministro somalí, Abdiweli Mohamed Ali, pero resultó ileso. Sin embargo, el ministro de Finanzas y dos diputados sí resultaron afectados por la explosión.
El grupo islámico somalí Al Shabab se atribuyó la autoría del ataque suicida, que ha dejado decenas de heridos. Esta milicia radical lucha desde hace cinco años contra el gobierno de transición en Mogadiscio.