Unas imágenes que mezclan el estilo de ilustración propio del anime con las imágenes religiosas más representativas del catolicismo ortodoxo, han generado una gran polémica en Rusia.
Las imágenes de un autor anónimo, se viralizaron en la red social rusa VKontakte, luego que varios usuarios empezaron a compartirlas. Estas mostraban pinturas de santos o estampas pero con los rostros reemplazados por personajes de anime.
Esta situación escandalizó a varios representantes de la Iglesia católica ortodoxa, quienes sugieren que dichas imágenes y la práctica de intervenir las imágenes religiosas corresponderían a un insulto a la religión.
El caso generó tanto revuelo, que llegó incluso a la televisión nacional.
Al respecto, el reconocido artista ruso, Dmitri Grozov, refirió que no se debería dar tanta importancia al tema, ya que se trataría de una "mala broma", en una entrevista para Sputnik.
"El contenido de los íconos de anime que actualmente se están discutiendo vigorosamente varía enormemente. Hay obras que han sido dibujadas con gran habilidad y alta calidad, y sin duda estas pueden llamarse arte. Después de todo, el anime en este caso es simplemente el estilo elegido por el autor", refirió Grozov.
Sin embargo, para el artista, muchas de las imágenes son "collages banales" o simplemente "bromas de muy mal gusto, que no poseen ningún valor artístico, hecho por niños y sin ninguna mala intención".
Por tal motivo, el artista consideró que se debería de dar atención al tema, y evitar una "cazería de brujas", ya que pareciera darle mayor protagonismo al autor o autores.
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