El presidente de Filipinas Rodrigo Duterte dijo que cuando fue alcalde de Davao, principal ciudad del sur del archipiélago, había matado personalmente a presuntos delincuentes para dar el ejemplo a la policía.
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Rodrigo Duterte hizo estos comentarios en un discurso al referirse a la campaña para erradicar el narcotráfico que condujo a la eliminación de miles de personas desde que asumió como presidente el 30 de junio.
Al evocar a los muertos por la policía en la actual guerra contra el narcotráfico, el mandatario señaló que había encabezado una política similar cuando era alcalde de Davao, que dirigió durante las últimas dos décadas.
"En Davao solía hacerlo personalmente. Simplemente para mostrarle a los muchachos (policías) que si yo lo podía hacer, ellos también", sostuvo el jefe de Estado.
"Salía por Davao con una motocicleta, una moto enorme, a patrullar las calles, y también buscando problemas. Realmente estaba buscando una confrontación para poder matar", agregó.
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En tanto, los Defensores de derechos humanos acusaron a Duterte de haber dirigido en Davao escuadrones de la muerte que mataron a más de 1.000 personas, incluyendo a niños. Duterte ha desmentido y reconocido haber jugado un papel en estos escuadrones de la muerte.
Por su parte, el senador filipino Richard Gordon advirtió hoy del inicio de un posible proceso de inhabilitación contra el presidente de Filipinas, luego de que el mandatario reconociera haber matado a supuestos drogadictos cuando era alcalde de Davao.
"Cuando dices algo como eso, te estás exponiendo, ¿verdad? Él lo dijo, así que legalmente puede enfrentarse a un proceso de inhabilitación", comentó el senador en referencia a las declaraciones de Duterte.