Increíble historia. En marzo del 2018, Joseph Cullen, de 29 años, perdió repentinamente el conocimiento en su vivienda después de sufrir síntomas similares a la gripe y fue trasladado de inmediato a un hospital del municipio de Derby (Inglaterra, Reino Unido). Rápidamente, la condición del hombre se deterioró: sus piernas se habían paralizado y su cerebro sufría una inflamación.
Según información del Daily Maily, Cullen padecía de encefalitis autoinmune. En un intento por tratar su enfermedad, los doctores encargados decidieron inducirlo en coma, pese a que podría no despertar.
Dos días antes de que se le indujera el coma, Billie Smith, la novia de Cullen, se enteró de que estaba embarazada; no obstante, dada la complicada situación, decidió no contarlo.
Meses después, ya en junio, Cullen despertó y su pareja le confesó que estaba embarazada y que se convertiría en padre por segunda vez. Al enterarse, el hombre lloró de la emoción.
Ya en diciembre del año pasado, gracias a la rehabilitación fisioterapéutica a la que se sometió, el hombre pudo sostener en sus brazos a su hija recién nacida.
De acuerdo al medio británico citado, está previsto que Cullen sea dado de alta en agosto próximo y los médicos guardan aún la esperanza que pueda volver a caminar.