El británico Richard Huckle (30) fue condenado este lunes a 22 cadenas perpetuas al admitir 71 cargos de abuso sexual contra niños de entre 6 meses y 12 años. La sentencia fue puesta por el Tribunal Old Bailey, el cual es el Penal Central de Inglaterra y Gales.
El juez encargado de este caso, Peter Rook, se valió de las más de 20 mil pruebas que lo acusan al sentenciado, entre las cuales existen fotografías y videos de los casi 200 niños abusados que eran oriundos de Malasia. El material pornográfico era compartido por Huckle en la 'Deep Web' para que otros pedófilos del mundo puedan verlo.
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El equipo de investigación que cubría el caso, encontró también mensajes enviados en el correo del violador, quien aclaraba que "los niños pobres son definitivamente mucho más fácil de seducir en vez de los niños occidentales de clase media".
Como señala la sentencia, los menores eran de una localidad de escasos recursos de Kuala Lumpur, ciudad de Malasia.
Cabe señalar que estos delitos fueron cometidos entre 2006 y 2014, cuando Huckle visitó el continente asiático porque se presentó como un cristiano practicante que tenía la 'misión' de evangelizar a los infantes.
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El juez Rook, ante su asombro al condenar este espeluznante hecho, en declaraciones a la prensa inglesa comentó que "es muy raro que un juez tenga que condenar todos estos delitos sexuales a una sola persona en una escala como esta".