Este sábado, las banderas estadounidenses ondearon a media asta en todo Washington. Más de 1,000 asistentes participaron del funeral de la ex primera dama de Estados Unidos, Barbara Bush, en Houston, Texas.
A la ceremonia se hicieron presentes los expresidentes Barack Obama y Bill Clinton, junto con sus esposas y exprimeras damas, Michelle Obama y Hillary Clinton, y la primera dama, Melania Trump.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no asistió. Según la Casa Blanca, fue para "evitar interrupciones y por respeto a los familiares y amigos de la ex primera dama".
Como se recuerda, durante la última campaña electoral, la familia Bush se mostró en contra de la candidatura presidencial del magnate norteamericano. Además, Trump se enfrentó duramente a Jeb Bush, hijo de Bárbara Bush, y entonces candidato por el partido republicano.
Más allá de ser la esposa del presidente George H.W. Bush (1989-1993) y la madre del también mandatario George W. Bush (2001-2008), la ex primera dama fue muy querida por trabajar y apoyar la causa de la alfabetización universal.
"Siempre supe que Barbara era la mujer más querida en el mundo y, de hecho, solía picarla diciendo que estaba acomplejado por ello", sostuvo hoy su esposo y ex presidente.