El ascenso de Mohamed al-Bashir como nuevo primer ministro del Gobierno de transición sirio marca un punto de inflexión para un país devastado por más de una década de guerra civil. Al-Bashir llegó al poder tras la caída del régimen de Bashar al-Assad en diciembre de 2024, luego de una ofensiva rebelde que culminó con el colapso del gobierno en Damasco. Su llegada al poder ha generado expectativas, pero también grandes desafíos en la reconstrucción de un país en ruinas.
El partido Baaz, del presidente derrocado, subrayó que apoya una transición "para defender la unidad del país".
¿Quién es Mohamed al-Bashir, el nuevo presidente de Siria?
Antes de convertirse en el nuevo primer ministro de Siria, al-Bashir lideraba el "Gobierno de Salvación" en la región rebelde del noroeste del país, controlado por Hayat Tahrir al-Sham (HTS), una de las principales facciones insurgentes del conflicto sirio. Su trayectoria está profundamente vinculada a los grupos opositores, y su liderazgo en esta etapa fue clave para derrocar a Assad. Sin embargo, la relación de al-Bashir con HTS y su implicación en una organización considerada terrorista por varios países, como Estados Unidos, genera preocupación internacional respecto a su capacidad para liderar un gobierno inclusivo y legítimo.
¿Cómo está Siria actualmente?
El nuevo gobierno de transición se enfrenta a una serie de retos monumentales. La guerra civil ha dejado un saldo de cientos de millas de muertos, millones de desplazados y un país en bancarrota. Al-Bashir ha prometido iniciar la reconstrucción, repatriar a los refugiados que huyeron del conflicto y garantizar la protección de todos los ciudadanos sirios, independientemente de su afiliación étnica o religiosa.
Sin embargo, el regreso de los refugiados, especialmente desde Turquía, es uno de los temas prioritarios de su agenda, aunque este proceso está condicionado por la estabilidad que pueda ofrecer su gobierno y la desconfianza de los países vecinos.
Repercusiones
El colapso del régimen de Assad y la llegada de al-Bashir también han alterado el equilibrio de poder en la región. Irán, uno de los principales aliados del régimen anterior, ha visto disminuir su influencia en Siria, mientras que otros actores como Israel y Turquía observan con cautela los desarrollos en el país. Israel, en particular, ha intensificado sus ataques contra remanentes de las fuerzas de Assad y está en busca de establecer una "zona de defensa estéril" en el sur de Siria.
Aprovecha la NUEVA EXPERIENCIA, recibe por correo y por Whatsapp nuestro periódico digital enriquecido. Perú21 ePaper.
VIDEO RECOMENDADO