Nominado al cargo de primer ministro por el propio jefe de Estado ruso, Vladimir Putin, el expresidente Dmitri Medvedev fue confirmado en el puesto por una aplastante mayoría en el Parlamento ruso.
Durante su mandato, fue Putin quien cumplió la función de primer ministro, por lo que tras conseguir el apoyo de 299 diputados de la Duma (Cámara de Diputados), este intercambio de funciones consolida la dupla Putin-Medvedev en el poder del gobierno ruso.
"Les agradezco por su confianza. Voy a trabajar, sin ahorrar esfuerzos, para cumplir las promesas que han sido formuladas por el presidente de Rusia y por mí. Estoy convencido de que si trabajamos juntos podemos conseguir resultados", dijo Medvedev a diversas fuerzas políticas representadas en la Duma.
Seguidamente Putin, quien cumple su tercer mandato en la presidencia, firmó el decreto que confirmó el nombramiento del nuevo primer ministro.