Sídney. La Policía de Nueva Zelanda presentó hoy cargos contra un varón acusado de posesión de explosivos en la ciudad de Christchurch, donde hace menos de dos meses un terrorista supremacista asesinó a tiros a 50 personas en dos mezquitas.
El material para la fabricación de bombas fue hallado junto a munición y varios cuchillos en una casa abandonada en el barrio de Phillipswtown, en el sureste de Christchurch, informa el portal local de noticias Stuff.
El acusado, que fue detenido la víspera y ha sido identificado como Jay Michael Harding-Reriti, de 33 años, se declaró este miércoles inocente de los cargos ante un juez de un tribunal de Christchurch.
El sospechoso no pidió la libertad bajo fianza y volverá a declarar ante el magistrado el 6 de mayo, esta vez mediante videoconferencia, mientras la policía ha solicitado un recurso para la supresión parcial sobre información del caso.
Por otro lado, las autoridades descartaron hoy que existan vínculos conocidos entre Harding-Reriti y el ataque terrorista del pasado 15 de marzo en Christchurch.
La ciudad se recupera aún de los ataques perpetrados por Brenton Tarrant, acusado de 50 cargos de asesinato y 39 de intento de asesinato tras haber disparado a quemarropa contra decenas de musulmanes que se encontraban dentro de dos mezquitas de la urbe.
Tarrant, quien carecía de antecedentes penales, residía en la localidad de Dunedin, situada a unos 400 kilómetros al sur de Christchurch, y obtuvo la licencia de armas en noviembre de 2017, tras cumplir con los requisitos legales.
El ataque terrorista en Nueva Zelanda ha obligado a los cuerpos de inteligencia y seguridad a replantearse la vigilancia de personas y organizaciones de extrema derecha, y ha suscitado un debate sobre el papel de las redes sociales, en las que el acusado retransmitió el atentado durante 17 minutos y publicó su ideario supremacista blanco de 70 páginas.
Fuente: EFE