Una ciudadana de Noruega murió de rabia generada por la mordedura de un cachorro de perro que rescató, meses atrás, en Filipinas, así lo informó la familia de la víctima.
Según contaron los parientes, la joven Birgitte Kallestad estuvo de vacaciones con unos amigos en ese país asiático, en febrero pasado. Durante uno de sus recorridos se encontró al cachorro al borde de una carretera y decidió rescatarlo.
"Birgitte puso al cachorro en una cesta y se lo llevó a casa. Lo limpió, curó, y, para su mayor alegría, se recuperó. Jugaba con el cachorro en el jardín", explicó la familia en un comunicado publicado el jueves por la tarde.
Sin embargo, con el transcurrir de los días, el cachorro comenzó a mordisquear los objetos de la vivienda y también a la propia Kallestad lo que le habría transmitido la enfermedad.
La joven, quien laboraba como empleada de un hospital, comenzó a presentar los primeros síntomas al llegar a Noruega y fue ingresada en cuidados intensivos en el hospital de Forde, donde murió el lunes por la noche.
Según el Instituto Noruego de Sanidad Pública, el último caso de rabia contraída por un humano en territorio metropolitano noruego se dio en 1815, y en 1826 para un animal.
Con información de AFP.