La Navidad saca lo mejor de las personas y una prueba de ello se vio el último fin de semana en West Reading, Pensilvania (Estados Unidos). Al menos 10,000 personas se reunieron para entonar villancicos frente a la casa de Laney Brown, una niña de ocho años con cáncer terminal y cuyo deseo era escucharlos desde su cama.
Los médicos de Laney le han dado pocas esperanzas de vida porque la leucemia que padece está muy avanzada: las células cancerígenas ya abarcan el 70% de su sangre.
Por ello muchos no dudaron en realizar este sueño y ella les agradeció publicando en su muro de Facebook una foto con los pulgares en alto.
Un segundo deseo de la pequeña –conocer a la cantante Taylor Swift– también se volvió realidad el último viernes, el día de su cumpleaños. Con la artista de música country mantuvo una conversación por videoconferencia.