El presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusó a la fiscal general Luisa Ortega de "traición" y de tener ambiciones presidenciales.
"Si se quiere meter en la diatriba política porque tiene aspiraciones de ser candidata presidencial de la MUD (alianza opositora), debe tomar las decisiones acertadas para eso. Tiene todos los derechos para hacerlo, pero no se puede utilizar una institución tan delicada", declaró Maduro.
Asimismo, aseguró ver "como una vulgaridad" el extremismo en que ha caído el Ministerio Público liderado por Ortega, quien se ha convertido en una de las mayores críticas de su gobierno, tras los fallos del Tribunal Supremo de Justicia contra el Parlamento, de mayoría opositora, y por su amplio rechazo a la Asamblea Constituyente convocada por el gobernante.
"Es muy triste que al final del camino (…) uno termine al servicio de los verdugos de nuestro pueblo", afirmó el jefe de Estado venezolano.
Por otro lado, Maduro también pidió la renuncia del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, "por inmoral".
Aseguró que esta sería "la única forma" de frenar el retiro de Venezuela del organismo, a pesar de haber iniciado el proceso de salida hace dos meses.
También aprovechó para adelantar que su gobierno no reconocerá ninguna resolución que surja de la OEA, que esta semana realizó su Asamblea General en Cancún (México) y pretendió sin éxito aprobar una declaración sobre la crisis.
"Venezuela no vuelve a la OEA nunca más y nadie de la OEA entrará en este país (…)", aseguró Maduro.