Esclavas sexuales u obligadas a abortar. Esa es la realidad de muchas mujeres en las filas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Se calcula que mil embarazos son interrumpidos al año dentro de sus filas, según datos hallados en computadoras decomisadas a los subversivos o testimonios de gestantes que huyeron para salvar al niño que llevan en el vientre, informó hoy el diario colombiano El Espectador.
En los correos se lee que los médicos que atienden estos procedimientos son "empíricos" y que para abortar se suele utilizar un medicamento "específico para las úlceras que produce contracciones uterinas". También se usa el misoprostol y hasta se dan indicaciones de cómo usarlo "efectivamente".
Entre los documentos investigados, figura un informe con fecha del 2007, en el que se lee: "En cuanto a salud, en este último periodo no se han realizado operaciones. Se han practicado un total de 17 legrados".
Otro correo publicado por El Espectador, esta vez del comandante 'Mono Jojoy' y fechado en 2006, detalla más: "La planificación es obligatoria y en los casos de embarazo hay que realizar el legrado. Hay que mantener el secreto de las áreas de los hospitales evitando que los pacientes conozcan todo lo que se tiene. Solo en casos de extrema gravedad se propone sacarlas para la ciudad".
Un experto en inteligencia de la Policía colombiana, que estudia este fenómeno, señaló que cada 36 horas una mujer de las FARC es sometida a esclavitud sexual por parte de cabecillas o mandos medios.
"Por cada guerrillera se calcula que entre cinco y siete guerrilleros pueden tener relaciones sexuales con ella durante su militancia. Si quedan embarazadas son obligadas a interrumpirlo. A la que se niega le hacen un consejo de guerra y la fusilan o le imponen trabajos forzados para que pierda al bebé", afirmó.
Una mujer que huyó de las filas de las FARC contó que solo las compañeras del comandante tienen privilegios y la posibilidad de tener hijos.