La Justicia de Panamá condenó a 22 años de cárcel a una madre que asesinó a golpes a su propio hijo de un año y cinco meses de edad.
La mujer identificada como Alma Regina Ortíz Barría fue encontrada culpable de causar la muerte del menor "debido a las lesiones", entre ellas una en la cabeza con un objeto contundente y otras en el abdomen.
Por este caso el padre de la víctima y esposo de la sentenciada, Milton Lorenzo Moreno, fue declarado inocente por el Jurado de Conciencia.
El fiscal Superior de Descarga, Francisco Rodríguez, logró demostrar, "basado en el informe realizado por medicina legal, que los traumas que presentaba el menor fueron ocasionados por objetos contundentes y focalizados de manera repetida tanto en la cabeza, así como diferentes partes del cráneo, abdomen, el tórax y las extremidades".
El fiscal señaló que el menor trató de defenderse, pues presentaba en las manos laceraciones. Además, agregó que, de acuerdo con las investigaciones, la madre se mantenía al cuidado de su hijo para los días en que ocurrió el hecho en Loma Bonita, San Miguelito.
"Los padres acudieron a un centro de salud alegando que su hijo se había caído de una silla, sin embargo, el informe médico forense sostuvo que la magnitud de las lesiones en la anatomía del infante no eran compatibles con una caída", informó el Ministerio Público de Panamá.
Fuente: EFE