Diez reos murieron este domingo en la cárcel San Pedro de Ycuamandyyu, en el departamento de San Pedro en Paraguay, tras un sangriento motín que tuvo como escenario principal el enfrentamiento entre bandas criminales vinculadas al narcotráfico: Primer Comando Capital (PCC) y el clan Rotela.
El Ministerio del Interior de Paraguay confirmó que de esas diez víctimas, seis murieron decapitados, tres fallecieron incinerados y el último fue asesinado con un arma blanca.
Además, los medios locales también señalan que los altercados dejaron varios heridos que fueron trasladados al hospital de San Pedro, centro que fue desalojado para evitar complicaciones y más daños, ya que no se descarta que los clanes quieran rescatar a sus integrantes.
La lucha entre clanes fue controlada algunas horas después por la Policía Nacional.
También comenzaron las pesquisas por parte del Ministerio Público para esclarecer las causas del enfrentamiento y no se descarta su vinculación con otro hecho similar ocurrido el viernes en la cárcel de Tacumbú en Asunción.
En esa penitenciaría fallecieron dos jóvenes menores de 30 años tras varias riñas con armas blancas.
En el último año se han recrudecido los levantamientos de presos en las cárceles, vinculados a grupos criminales como el PCC o al también brasileño Comando Vermelho.
AGILIZAR PROCESOS DE EXTRADICIÓN
La presencia de estos criminales en los penales paraguayos impulsó hace unos meses al Gobierno local a agilizar las expulsiones y los procesos de extradición a los países en los que son requeridos por la Justicia.
Ambos grupos operan en Paraguay, especialmente en las zonas fronterizas con Brasil, como la ciudad de Pedro Juan Caballero, donde controlan el tráfico de drogas.
Las autoridades incrementaron su política de expulsiones a partir de noviembre de 2018, después de que el narcotraficante brasileño Marcelo Pinheiro, alias 'Piloto', del Comando Vermelho, asesinara a una mujer que le visitó en su celda, con el fin de evitar su extradición a Brasil.