Un religioso culpa a la comunidad gay de "distorsionar la orientación sexual" de las personas y exhorta a protestar con ella. (Foto referencial: EFE)
Un religioso culpa a la comunidad gay de "distorsionar la orientación sexual" de las personas y exhorta a protestar con ella. (Foto referencial: EFE)

Los sectores judíos ultraortodoxos se preparan para protestar mañana contra la LGTB de Jerusalén, que se celebrará como cada año en un espacio cercado y bajo grandes medidas de seguridad, y en la que hace tres años un extremista religioso asesinó a una asistente adolescente.

El rabino Yigal Levinstein, de la yeshivá (escuela talmúdica) pre-militar Bnei David, llamó a la población ultraortodoxa a salir a protestar contra lo que considera "una abominación" que "promueve la perversión", informó hoy el digital Ynet.

En una carta titulada "Lucha por la imagen del Estado de Israel", el religioso culpa a la comunidad gay de "distorsionar la orientación sexual" de las personas y "tratar de hacer que todo un país acepte la ley que reconoce que el coito homosexual es una unión familiar legítima".

Levinstein se opone a la demanda de la comunidad de que se les permita tener niños por maternidad subrogada, ya que considera que les criarán "en una realidad moralmente distorsionada".

"¿Permitiríamos el incesto en nombre de la igualdad?. ¿Permitiremos el sexo homosexual en nombre de la igualdad?", se pregunta en la misiva, en la que defiende "la santidad del matrimonio y la familia a través de la Torá (Biblia, Pentateuco)" y califica el sexo con personas del mismo sexo de "decadencia moral".

En el lado opuesto, 60 rabinos ortodoxos firmaron una carta de apoyo a la comunidad LGTB, en la que resaltan la importancia de que haya "voces alternativas" sobre este asunto en los sectores religiosos y piden el fin del discurso discriminatorio contra los homosexuales.

"Hace tres años vimos donde lleva este tipo de discurso, cuando se derramó sangre inocente en las calles de Jerusalén", advirtieron los rabinos, recordando el asesinato en 2015 de la adolescente Shira Banki, apuñalada por un ultraortodoxo que hirió a otras cinco personas durante el desfile del orgullo.

Frente al carácter festivo, multitudinario y exaltado que esta reivindicación tiene en Tel Aviv, en Jerusalén se celebra bajo grandes medidas de seguridad, por un recorrido cerrado con verjas, y protegido por policías uniformados y de paisano, con un tono mucho más discreto y recatado, y que se centra en reclamar un espacio para la comunidad en una ciudad sagrada para el judaísmo, el cristianismo y el islam.

Con información de EFE.