El régimen iraní ya ha amenazado a cerca de 2 mil mujeres por no llevar el velo

Tras haber encontrado en grabaciones por cámaras de vigilancia a cerca de 2 mil mujeres sin llevar puesto el velo, la Policía de la provincia de Azerbaiyán Occidental, en Irán; envió mensajes amenazantes a las mujeres por “incumplir las normas”.

Las autoridades también declararon que se cerrarán cerca de 80 locales comerciales donde se incumplía la ley de vestimenta, según información dada al diario local ‘Etemad’.

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Para controlar a las mujeres que estuvieran “incumpliendo la ley” de no llevar el velo, la policía de Irán ha usado cámaras de videovigilancia basadas en tecnología que se aplica sobre todo para el control de tráfico rodado.

El jefe de la Policía iraní, Ahmad Reza Radan, habló del avance del plan “de castidad y hiyab”, que refuerzaría el uso del velo en la población mediante el uso de las cámaras.

“Las cámaras de seguridad no cometerán errores”, comentó Radan en unas declaraciones dadas el periódico ‘Hammihan’ en el Día de Quds.

Fue hace tan solo una semana que la Policía implementó estas cámaras para este uso.

“La Policía utilizará herramientas innovadoras y cámaras inteligentes en la vía pública para evitar cualquier tensión y conflicto con los compatriotas relacionados con la ley del hiyab para identificar a la gente que incumpla la Ley del Hiyab y la Castidad Pública”, detalló la Policía en un comunicado dado a la agencia de noticias iraní Mizan.

Protestas por solidaridad

La rebelión de parte de mujeres surgió a partir de las protestas por la muerte de Mahsa Amini el pasado otoño. La joven fue violentamente arrestada por llevar incorrectamente el velo. Tras fallecer, varios salieron en protesta para criticar lo que se ha visto por años como un acto de opresión patriarcal: la imposición del velo a las mujeres.

Ante el gran rechazo, por un tiempo Teherán pareció querer ignorar las normativas, incluso haciendo que la Policía de la Moralidad dejara de espiar por las calles. Pero las autoridades religiosas han vuelto a la carga, presionando a los políticos para que sean más severos con aquellas que “infringen la ley”.

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