Una madre vivió momentos de pánico y angustia luego que su hijo y su vehículo desaparecieron en la localidad de Almargen, en Málaga (España). Ella había dejado estacionado el automóvil para realizar algunas gestiones y al volver se dio con la sorpresa que había sido robado con el pequeño en su interior.
El ladrón se había percatado que la mujer dejó las llaves puestas en el contacto y aprovechó la situación para llevárselo y darse a la fuga; sin embargo, no advirtió que el niño se encontraba sentado en la parte trasera.
La mujer, al notar la ausencia de su hijo, buscó ayuda de inmediato. Los vecinos de Almargen se organizaron para dar con el paradero del menor.
El medio español La Vanguardia señaló que el delincuente, al percatarse de la presencia del niño, buscó una rápida solución: encontró una gasolinera a cinco kilómetros de donde robó el vehículo, en la carretera de Antequera, y dejó que bajara en la estación de servicios.
Más adelante, las autoridades señalarían que el pequeño no sufrió daño alguno.
Cuando el niño se alejó del coche, él se volvió a dar a la fuga sin dejar rastro. De momento, la Guardia Civil sigue buscándolo, tanto a él como al vehículo, y se mantiene abierta la investigación para esclarecer los hechos.
El medio ya mencionado indica que no sería la primera vez que este tipo de situaciones ocurre en la región.
En septiembre de este año, una madre sevillana vivió momentos de angustia parecidos a los de la familia de Málaga.
En esta ocasión, la mujer había ido a recoger a su bebé a la guardería dejando el coche estacionado en la entrada de un edificio, encendido y con otro hijo de 5 años en el interior. Al salir, se dio cuenta de que ni el niño ni el vehículo estaban, y que un ladrón había robado el turismo en el que viajaban huyendo rápido del escenario.
Media hora después del suceso, apareció el pequeño y el automóvil a las afueras del municipio de Villanueva del Ariscal, Sevilla.
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