Detalles que no pasan desapercibidos. Uno de los tantos privilegios que posee la reina Isabel II del Reino Unido como miembro de la realeza británica es que es la única persona en todo el país que no tiene ni necesita una licencia para conducir y no la pueden detener por eso, ¿Las razones? Aquí las explicamos todo.
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La cabeza de la familia real británica lleva más de 70 años manejando sin la necesidad de una tarjeta para estar al volante ya que los permisos, según la ley británica, se emiten a su nombre. Además, su vehículo oficial tampoco requiere de una matrícula o placa.
Isabel II no necesita permiso de conducir en el Reino Unido debido a los poderes que goza como soberana y está excluida de las regulaciones y leyes que afectan al reglamento de circulación.
La monarca, que no sube a un avión desde 2015, maneja desde que tenía 19 años, pero las normas de protocolo de los royals destacan que debe tener un chofer; sin embargo, cuando tiene ganas de tomar el volante lo puede hacer.
Según destaca el medio ‘20 minutos’, es poco probable ver a la reina de 95 años manejando por las calles de Londres, pero sí al interior de Windsor donde puede tomar uno de los tantos Bentleys y Jaguars que tiene.
En declaraciones a la revista ¡Hello!, Simon Morgan, el exjefe de seguridad de la casa real, explicó que a veces tampoco no usa el cinturón de seguridad para escapar rápidamente en caso de emergencia.