Manifestantes iraníes ingresaron hoy a dos complejos de la embajada británica en Teherán. Rompieron las ventanas, quemaron la bandera y arrojaron cócteles molotov en medio de una protesta contra nuevas sanciones de Londres.
Los ataques ocurren luego de la rápida aprobación del Consejo de Guardias de Irán de un proyecto parlamentario que obligaba al Gobierno a expulsar al embajador británico en represalia por las penalidades contra Teherán a causa de su polémico programa nuclear.
Un funcionario iraní, que declinó ser identificado, dijo a la agencia Reuters que el ataque contra las sedes diplomáticas británicas en Teherán no fueron planeadas por el Gobierno.
Decenas de manifestantes se separaron de una protesta afuera del principal complejo de la embajada. La agencia de noticias Mehr reportó que los manifestantes bajaron la bandera británica del complejo, la quemaron y la sustituyeron por la iraní. Adentro, arrojaron piedras y cócteles molotov.
Un grupo separado de personas ingresó en otro complejo de la embajada británica en el norte de la ciudad y tomó "documentos clasificados", dijo la agencia de noticias estatal IRNA.