Soldados y empleados de salud rociaron la capital de con desinfectante para evitar posibles enfermedades que puedan propagarse a causa de una enorme inundación que ha provocado la muerte de 60 personas y ha afectado a miles más.

Las lluvias y las crecidas en los ríos han sumergido a una docena de distritos en la zona de Yakarta desde el pasado miércoles luego de unas tormentas torrenciales registradas en la víspera de Año Nuevo, causando deslaves en áreas montañosas en las afueras de la capital que dejaron enterradas a varias personas.

Es la peor inundación que se ha registrado en la zona desde 2007, cuando 80 personas perdieron la vida en 10 días.

Más de 1.000 soldados y trabajadores de salud rociaron desinfectante el domingo en zonas fuertemente afectadas, anticipándose a posibles enfermedades propagadas por las aguas, como el dengue o leptospirosis -un padecimiento letal que se propaga a través de la orina de las ratas- dijo Ridwan Carman, quien está a cargo de la respuesta de emergencia y de recuperación para la Cruz Roja local.

La enorme inundación que ha provocado la muerte de 60 personas y afectado a miles más. (AFP)
La enorme inundación que ha provocado la muerte de 60 personas y afectado a miles más. (AFP)

Se desplegaron alrededor de 11.000 trabajadores para proporcionar atención médica a las personas afectadas por las inundaciones, dijo Terawan Agus, ministro de Salud, en un comunicado. Añadió que no se han registrado casos de leptospirosis, tétanos o enfermedades graves transmitidas por el agua.

En Lebak, un distrito en la vecina provincia de Banten -donde inundaciones repentinas y aludes arrasaron con más de 1.700 casas y destruyeron varios poblados-, los rescatistas seguían buscando por un niño de 7 años que se reportó fue arrastrado por una corriente que provocó la muerte de por lo menos nueve personas, señaló Zainal Arifin, jefe de la agencia de labores de búsqueda y rescate local.

Comentó que los aludes habían cubierto gran parte de la zona y que los apagones y falta de telecomunicaciones obstaculizaban las labores de búsqueda.

El presidente indonesio Joko Widodo no pudo reunirse con los sobrevivientes de la azotada localidad de Sukajaya, donde se reportaron la mayor cantidad de muertes, debido a que el helicóptero en el que viajaba no pudo aterrizar a causa del mal clima, informó la oficina de la presidencia en un comunicado. La localidad se ubica en el distrito de Bogor, el más afectado y donde 16 personas fallecieron por inundaciones repentinas y deslaves.