Indignante caso de maltrato animal. Una vez más, la localidad mexicana de Mochitlán está en los ojos del mundo después de haber celebrado la festividad de Santa Ana, evento en el que la población acostumbra apuñalar a un toro y beber su sangre mientras el animal agoniza.
Durante esta tradición, llamada 'El paseo del toro', se asesina al menos a treinta animales. Primero los vecinos corren hacia el toro, luego lo montan y una vez 'domado', lo arrastran para finalmente darle una punzada en el vientre. Es ahí cuando los presentes se acercan con un vaso para servirse la sangre. Niños y adultos participan de esta cruel práctica.
Un video publicado por la agencia Reuters muestra cómo los vecinos del lugar participan de este 'homenaje'. "Se dice que si la tomas, es como si tomaras agua bendita" porque "al toro ya lo pasaron a la iglesia y lo presentaron ante la abuelita Santa Ana", se le escucha decir a uno de los participantes.
Giovanni Jiménez Mendoza, alcalde de Mochitlán, contó a Reuters que llegó una carta del Vaticano dirigida al sacerdote en la que pedía que se prohibiera la ceremonia, a lo que se negaron porque es "una tradición".
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