Redacción PERÚ21

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Cuatro manifestantes murieron este lunes en el estado de Uttar Pradesh, en el norte de la , en medio de las protestas violentas que tienen lugar en el país contra una controvertida ley que excluye a los inmigrantes musulmanes de la vía a la ciudadanía.

Los cuatro manifestantes murieron en protestas llevadas a cabo en distintas ciudades del estado norteño, algunas de las cuales se tornaron violentas, pese al despliegue de seguridad y las restricciones de reunión y comunicación impuestas por las autoridades, según confirmó a Efe la policía regional.

Según algunos medios locales, existiría una quinta muerte más.

Las muertes se registraron en las ciudades de Sambhal, Firozabad, y Kanpur, respectivamente, indicó un oficial de la oficina del director general de la Policía de Uttar Pradesh, O.P. Singh.

Las autoridades aseguraron que los manifestantes perdieron la vida en medio de la violencia, al tiempo que negaron que estas muertes hubieran sido causadas por las fuerzas de seguridad.

Con estas muertes se elevan a 11 los manifestantes que han perdido la vida tras dos semanas de intensas protestas en todo el país.

Tres personas murieron ayer en protestas similares, una de ellas la ciudad de Lucknow, la capital de Uttar Pradesh, y otras dos en la ciudad de Mangaluru, del estado de Karnataka, en el sur de país.

La semana pasada cuatro personas más murieron en el estado de Assam.

Las protestas comenzaron el lunes de la semana pasada cuando el Gobierno del primer ministro, Narendra Modi, presentó en el Parlamento una enmienda a la ley de ciudadanía que permitiría regularizar a los inmigrantes procedentes de Afganistán, Pakistán y Bangladesh llegados al país antes de 2014 y pertenecientes a las religiones hindú, sij, budista, jain, parsi y cristiana.

La norma, aprobada en tres días por el órgano bicameral, provocó el rechazo de buena parte del país que la encuentra contraria al espíritu laico de la nación y discriminatoria hacia los musulmanes.

Las manifestaciones subieron de tono después de que el pasado fin de semana la policía entrara sin permiso en una universidad capitalina destinada principalmente a musulmanes y cargara duramente contra los estudiantes.

Las autoridades han impuesto restricciones de movimiento y comunicación en varias zonas del país como parte de las medidas para contener las manifestaciones.



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