Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Un controvertido plan de la Unión Europea para frenar la migración y deshacer las redes de contrabandistas humanos en comenzó el lunes con la deportación de 202 migrantes y refugiados que eStaban en dos islas griegas. Fueron subidos en barcos y enviados de vuelta a Turquía.

Bajo fuertes medidas de seguridad, las autoridades de las islas griegas de Lesbos y Quíos deportaron a las personas de 11 naciones, aplicando la primera deportación de un plan que ha suscitado fuertes críticas de los defensores de derechos humanos, pero que es visto por algunos países europeos como la única manera de resolver la crisis de la migración del continente.

El primer buque, que salió de Lesbos, fue acompañado al puerto turco de Dikili por la guardia costera turca, mientras un helicóptero sobrevolaba la zona. Los migrantes fueron llevados a carpas blancas y rojas para controles de registro y verificación de salud.

Cerca de una decena de personas los recibieron en el puerto con un cartel que decía 'Bienvenidos refugiados. Turquía es su casa'. Esa expresión contrastó marcadamente con las protestas realizadas durante el fin de semana por los residentes, que temen que Dikili se vuelva una zona de refugiados.

Un segundo barco partió luego desde Lesbos y un tercero de la cercana isla de Quíos, el lunes por la tarde.

OPERACIÓN CUESTIONADA"Todos los migrantes devueltos son de Pakistán, salvo por dos migrantes de Siria que regresaron de forma voluntaria", dijo Giorgos Kyritsis, dijo a la televisora estatal un portavoz del comité del gobierno para la crisis de refugiados.

"Éste es el primer día de un momento muy difícil para los derechos de los refugiados. Pese a las serias brechas legales a y a la falta de protección adecuada en Turquía, la UE sigue adelante con un peligroso acuerdo", dijo a The Associated Press Giorgos Kosmopoulos, responsable de Amnistía Internacional en , que estaba en Lesbos.

"Turquía no es un tercer país seguro para los refugiados. Las autoridades de la UE y Grecia lo saben y no tienen excusa", añadió. Un total de 50,000 migrantes y refugiados están varados en Grecia tras el cierre de fronteras en la UE y los Balcanes, pero sólo los que llegaron después del 20 de marzo serán detenidos para su deportación.

TAGS RELACIONADOS