Gobierno de Canadá confirma el arresto de un tercer ciudadano en China

El gobierno de Canadá confirmó el arresto de un tercer ciudadano en China en los últimos días, en medio de la tensión diplomática entre Ottawa y Pekín tras la detención en Vancouver de una directiva del grupo chino Huawei.

Sin embargo, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, enfatizó que la detención no parecía estar vinculado a los dos precedentes, de un ex diplomático y un empresario, por presuntamente poner en peligro la seguridad nacional de China.

"Estamos estudiando los detalles pero esta (detención) más reciente no parece ajustarse al patrón establecido para las dos anteriores", dijo Trudeau en una conferencia de prensa.

Más temprano, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Canadá, Maegan Graveline, había asegurado que el gobierno "estaba al tanto" de la detención de otro ciudadano canadiense, sin dar mayores detalles. El ciudadano no ha sido identificado.

La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Chunying, sostuvo ante los medios que ella "no había escuchado" sobre la detención, que fue reportada primero por el diario National Post de Canadá.

Según el National Post, el tercer individuo no es un diplomático ni un gerente de alguna empresa con sede en China.

Una fuente gubernamental canadiense destacó sin embargo que "no hay razón para creer que este caso esté vinculado a otros recientes de canadienses arrestados en China".

El 10 de diciembre, las autoridades chinas arrestaron a dos canadienses que viven en China: al ex diplomático Michael Kovrig, empleado del International Crisis Group (ICG), y Michael Spavor, consultor frecuentemente relacionado con Corea del Norte.

— "Seguridad nacional" —

China sospecha que ambos hombres son una amenaza para la "seguridad nacional", pero para muchos observadores su detención es un medio de presión sobre Ottawa en el caso de Huawei.

Pekín, que asegura que esos dos arrestos no están relacionados, ha mostrado su ira contra Canadá tras la detención a comienzos de diciembre de la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou, a pedido de la justicia estadounidense.

Hija del fundador del gigante chino de las telecomunicaciones, la ejecutiva fue puesta en libertad bajo fianza la semana pasada a la espera de su audiencia de extradición hacia Estados Unidos, que la acusa de complicidad en un fraude para evitar las sanciones del país norteamericano contra Irán.

Pekín amenazó a Ottawa de "graves consecuencias" si no era liberada de inmediato. La justicia canadiense la puso bajo arresto domiciliario en Vancouver, donde posee dos casas de lujo, mientras se procesa la solicitud estadounidense.

Fuente: AFP