El acto sexual ocurrió cuando el 31 de enero de este año. (Foto/Referencial)
El acto sexual ocurrió cuando el 31 de enero de este año. (Foto/Referencial)

Redacción PERÚ21

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Era mayo del 2016 cuando el pueblo santiagueño de Quimilí, en , se estremeció con un aberrante hecho: el cuerpo de Mario Augusto Salto, un niño de solo 11 años, apareció asesinado y descuartizado en un basural. Previamente, había sido violado de forma reiterada.

En ese entonces, las autoridades emprendieron las investigaciones en torno al caso para dar con los responsables del aberrante crimen. Con los estudios de ADN sobre las evidencias halladas en torno al cadáver y la ropa, "se determinó que había dos ADN distintos. En este material se ha estudiado el cromosona 'Y' y nos han informado que eran de la misma familia. Podían ser hermanos o parientes por la línea paterna", informó la jueza que lleva el caso, Rosa Falcó, en torno a los responsables.

Han transcurrido dos años, y tras estas evidencias sobre los autores materiales del delito, la jueza dispuso tomar muestras de ADN a más de 3000 mil habitantes de Quimilí. Rosa Falcó entiende que de este modo se podrá identificar a los culpables, que podrían ser hermanos.

"Después de muchas incidencias en la causa, que lleva más de dos años de investigación, se ha establecido la necesidad de encontrar al autor material del abuso. Se determinó que se tome una muestra de ADN por familia, de todas las familias del pueblo, del invididuo mayor de edad del grupo", contó Falcó.

Agregó que podría haber "una coincidencia de ADN con la hallada en el cuerpo del menor".

La toma de ADN a los habitantes de Quimilí se realizó a través de un hisopado bucal y culminó el viernes pasado. 

El análisis se llevará al laboratorio de genética del Poder Judicial de Santiago del Estero. "Es un proceso que se hace paulatinamente. Lleva el tiempo normal del proceso", añadió la jueza y pidió calma a la población en torno al caso.

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