La Unión Europea (UE) decidió trabajar en nuevas sanciones contra Irán en el sector financiero, de transporte y de energía, en respuesta a su programa nuclear, según señala un comunicado oficial del organismo.
Reunidos en Bruselas (Bélgica), los cancilleres de la UE se pusieron "de acuerdo para ampliar las sanciones existentes, en estrecha cooperación con sus aliados internacionales, examinando nuevas medidas para afectar seriamente el sistema financiero iraní, el sector de transportes, el de energía", indica el texto.
Estas medidas estarán diseñadas "antes del próximo Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores" previsto en enero próximo en la capital belga, añade el documento.
En declaraciones a la AFP, un diplomático europeo estimó que la formulación es "bastante imprecisa" para que se pueda seguir barajando la posibilidad de aplicar un embargo sobre el petróleo, opción que defienden Francia y Alemania, pero no otros países del Viejo Continente que dependen del crudo iraní.
"Decidimos trabajar en aras de sanciones más duras y sin precedentes en los sectores financiero y petrolero", indicó el canciller francés, Alain Juppé.
Los ministros europeos de Relaciones Exteriores aprobaron también una ampliación de su lista de personas y entidades sancionadas por sus vínculos al programa nuclear iraní, y sumaron 180 nuevos nombres que se darán a conocer mañana viernes en el Diario Oficial de la UE.
Todos estos nuevos pasos son la respuesta europea al último informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que acusa a Irán de haber trabajado en la tecnología necesaria para fabricar armas nucleares.