En su primera visita oficial al país desde su elección, el mandatario turco se entrevistará en dos ocasiones con Angela Merkel y Frank-Walter Steinmeier. (Foto: AFP)
En su primera visita oficial al país desde su elección, el mandatario turco se entrevistará en dos ocasiones con Angela Merkel y Frank-Walter Steinmeier. (Foto: AFP)

Un año y medio después de haber denunciado "las prácticas nazis" del gobierno alemán, el presidente de Recep Tayyip Erdogan iniciará el jueves en una visita oficial con la que pretende reconciliar a ambos países.

Entre Ankara y Berlín hubo varios temas de disputa en los últimos años, desde el intento de golpe de Estado de 2016 contra Erdogan, que reprochó a Alemania su falta de apoyo, hasta las detenciones de ciudadanos alemanes en Turquía.

Pero ha llegado la hora del deshielo, aunque siete alemanes siguen encarcelados en Turquía.

"El primer objetivo de esta visita es acabar definitivamente con el periodo (de tensiones) que atravesaron nuestras relaciones bilaterales en los últimos años", declaró Erdogan el domingo antes de viajar a Estados Unidos, desde donde se dirigirá directamente a Alemania.

En su primera visita oficial al país desde su elección como presidente en 2014, Erdogan se entrevistará en dos ocasiones con la canciller, Angela Merkel, y también con el presidente Frank-Walter Steinmeier. El sábado inaugurará la mezquita de Colonia, financiada por una organización turca.

— Rivales para la Eurocopa de 2024 —

Erdogan llegará a Berlín el mismo día en que la UEFA anunciará el país anfitrión de la Eurocopa de fútbol de 2024 entre los dos candidatos, precisamente Turquía y Alemania.

El presidente turco tiene cuestiones importantes que abordar con el Gobierno alemán. En un contexto turco marcado por una fuerte crisis económica y una relación deteriorada con Estados Unidos, Erdogan espera "medidas" para fortalecer las relaciones entre los dos países. Con cerca de 7,500 empresas alemanas presentes en Turquía, Berlín es un socio imprescindible.

El grupo alemán Siemens quiere lograr un contrato para construir líneas de tren de alta velocidad cuyo precio total podría alcanzar los 35.000 millones de euros (41.180 millones de dólares).

El dirigente turco desea además que Alemania, donde viven cerca de tres millones de personas de origen turco, desempeñe un "papel constructivo" en varios asuntos cruciales como el proceso de adhesión de Turquía a la Unión Europea o la exención de visados.

La cuestión siria también estará en el centro de las conversaciones entre ambos países, que entre los dos acogen a varios millones de refugiados sirios y quieren evitar una nueva llegada de migrantes.

Erdogan también espera que Alemania luche "con más eficacia" contra los partidarios del predicador Fethullah Gülen, acusado de instigar el intento de golpe de Estado de 2016, y contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), una organización considerada como terrorista por Ankara y la Unión Europea.

— Merkel no acudirá a un banquete —

Berlín y Ankara viven una "especie de luna de miel", resume Kristian Brakel, especialista de Turquía en el seno de la Fundación Heinrich Böll, cercana a los Verdes. "Sin embargo, la situación en Turquía no ha mejorado, al contrario", asegura.

El recibimiento con gran pompa que se prepara para Erdogan, acusado de deriva autoritaria, suscita críticas en Alemania.

Tras haber tratado a los alemanes de "fascistas" por haber rechazado la celebración de mítines electorales turcos en 2017, quiere volver a ser "nuestro amigo" ahora que la economía turca se desploma, escribe el diario popular Bild.

Para el periodista germano-turco Deniz Yücel, corresponsal del diario Die Welt detenido desde hace más de un año en Turquía, Alemania "traiciona a todos aquellos que aspiran a una sociedad libre, democrática y laica".

En otro ejemplo del malestar suscitado por esa visita, varias personalidades políticas anunciaron que no acudirán al banquete celebrado el viernes por la noche en honor de Erdogan en el palacio de Bellevue, la residencia oficial del presidente alemán. Y Merkel tampoco estará en esa cena, una ausencia cuyo motivo se desconoce.

Se esperan numerosas manifestaciones durante la visita del presidente turco, que goza de poderes reforzados desde el comienzo de su nuevo mandato en julio.

Los opositores, especialmente los kurdos, desfilarán el viernes en Berlín. Los organizadores esperan 10 mil personas. Otra gran protesta tendrá lugar el sábado en Colonia.

Fuente: AFP

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