El colmo de la desfachatez. Un trabajador de la Municipalidad de Calpe, en Alicante, España, invadió una casa junto a toda su familia y, ahora que volvió el dueño, le solicita a este el pago de 40 mil euros por todas las reformas que habría realizado en la propiedad.
“Lo he intentado todo: hablar con el sujeto, ir a la Guardia Civil, ir a la Policía, pero nada da resultado”, confesó con mucha frustración Langford Dominic Sakarai, propietario del inmueble, quien reside en Suiza desde hace un poco más de un año.
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El dueño del chalet en Calpe tuvo que contratar los servicios de una empresa de desocupación muy conocida en Alicante, pero aún así no pudo sacar al autodenominado “inquilino” de su propia casa.
En las imágenes difundidas este sábado 17 de junio, se ve cómo Pedro, el invasor, disfruta de la piscina de la residencia en ropa de baño, mientras escucha los pedidos y hasta amenazas para que devuelva la propiedad.
Hasta el cierre de esta nota, Langford Dominic Sakarai y su madre permanecen en un hotel de la ciudad a la espera de poder resolver la situación de su inmueble y recuperar su paz y estabilidad familiar.