Gran sorpresa se llevaron los policías del aeropuerto de Múnich (Alemania) al encontrar dentro de una maleta los huesos humanos de un hombre. Las dueñas de la valija eran una mujer y su hija quienes se dirigían a Armenia.
La señora de 74 años y su hija, de 52, fueron llevadas a una cámara donde las interrogaron con el fin de saber el motivo del traslado de los restos. Luego de horas de cruce de información, los funcionarios de aduana, un médico y fiscales, determinaron que era verdad lo que aseguran las mujeres.
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Según las autoridades alemanas, se determinó que ambas estaban trasladando los huesos para ser enterrados en su natal Armenia luego de resolver legalmente el cambio de lugar de entierro. Ellas habían hecho escala en Múnich y Kiev.
Además se supo que no se trataba de ningún delito, ni asesinato. El deceso del hombre se produjo por muerte natural y había fallecido en el año 2008 en Grecia, donde fue enterrado en primera instancia.
De acuerdo con el diario argentino El Clarín, la forma más común de honrar a los muertos en Armenia es el entierro, puesto que no se permite la cremación, según dicta su cultura. “Muchas familias también incluyen una foto del difunto en su lápida”, asegura el medio.
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