Una nave espacial secreta no tripulada de aterrizó el viernes en tras permanecer 22 meses en órbita, informaron fuentes oficiales que no revelaron la naturaleza de la misión.

El avión X-37B tocó tierra en la base militar Vandenberg, de donde partió el 11 de diciembre de 2012.

"Estoy muy orgulloso de que nuestro equipo haya podido realizar el tercer aterrizaje exitoso de esta nave", expresó el comandante Keith Balts, de la 30° división espacial del Ejército estadounidense.

Expertos creen que lleva equipo de espionaje en su bodega de carga. Otras teorías apuntan a que la nave sería capaz de capturar los satélites de otras naciones o seguir el laboratorio espacial de China.

Las autoridades estadounidenses solo adelantaron que su objetivo no es crear un "arma espacial" que puede derribar otros satélites.

El Ejército del aire asegura que la nave no tripulada puede probar tecnología reutilizable para equipamiento espacial y llevar a cano experimentos que luego pueden ser analizados en la Tierra.

La X-37B fue creada por United Launch Alliance, una compañía formada entre Boeing y Lockheed Martin. Las otras dos misiones duraron 225 y 469 días respectivamente.