El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, anunció hoy que Dzhokhar Tsarnaev, sospechoso del atentado en el maratón de Boston ocurrido hace una semana, no será tratado como "combatiente enemigo" y será juzgado a través del sistema judicial penal de Estados Unidos.
"No va a ser tratado como combatiente enemigo. Vamos a procesar a este terrorista a través de nuestro sistema civil de justicia, pues de acuerdo con las leyes de Estados Unidos, los ciudadanos estadounidenses no pueden ser juzgados por comisiones militares", expresó Carney.
Fuentes judiciales federales informaron de que las autoridades ya presentaron cargos contra Tsarnaev, quien sigue internado en el Hospital Beth Israel Deaconess tras resultar herido el pasado viernes durante la persecución policial que acabó con su captura.
"Se ha presentado un auto de procesamiento bajo secreto sumarial", declaró el juez presidente del Quinto Circuito de los Tribunales de Estados Unidos, Gary Wente, el magistrado que presentó los cargos contra Tsarnaev.
Previamente, medios estadounidenses reportaron que la Fiscalía de Boston acusaría a Dzhokhar de terrorismo por el atentado que dejó tres muertos y más de 170 heridos, lo que permitiría que sea juzgado ante un tribunal federal y, potencialmente, condenado a muerte.
La solicitud de una pena de muerte exigiría trasladar el caso fuera del estado de Massachusetts, donde no es legal ese castigo. La idea de la fiscalía es presentar cargos por terrorismo para que el caso sea de competencia federal.
Cabe indicar que la acusación de terrorismo exige probar la existencia de un complot, de planes premeditados de crear un daño indiscriminado y una serie de dificultades técnicas que pueden alargar y hacer más compleja la solución judicial de este atentado.
Si Tsarnaev no se declara culpable, no será fácil para la fiscalía tener un caso consistente como para reclamar la pena de muerte, que requiere, no solo pruebas circunstanciales, sino testimonios directos y testigos.
Lo abogados podría alegar, además de la juventud del acusado, su posible papel secundario en el atentado, que podría haber sido exclusivamente obra de su hermano mayor, Tamerlán.