Lars Vilks, el artista sueco que escapó del ataque a un evento sobre la libertad de expresión en Copenhague, Dinamarca, el último sábado, confirmó a la cadena norteamericana CNN que ha pasado a la clandestinidad por razones de seguridad.
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Según la Policía sueca, "la situación tomó una dimensión completamente nueva (…). Vilks, de 68 años, ya no puede vivir en su casa y se encuentra en un lugar desconocido". Así lo señaló una portavoz que prefirió el anonimato.
El caricaturista está incluido en una lista de blancos de Al Qaeda y viaja a todas partes con guardaespaldas. Recibió amenazas de muerte por representar en forma satírica al profeta Mahoma (por ejemplo, con el cuerpo de un perro).
En tanto, la justicia danesa decretó la prisión preventiva de diez días a dos sospechosos de ayudar al autor de los atentados en Dinamarca.
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La Policía cree que los jóvenes, de 19 y 21 años, proporcionaron el arma para el primer ataque y ocultaron durante un tiempo al tirador mientras era buscado antes de ser abatido el domingo.
DATOS
En 2007, un grupo vinculado a Al Qaeda en Iraq puso precio a la cabeza de Vilks. En 2014, se denunció un complot para matar al artista.
En 2010, dos hermanos fueron sentenciados por intentar atacar con bombas la casa de Vilks.