Día Universal del Niño: El 50% de los desplazados en Siria son niños

El 20 noviembre se celebra en todo el mundo el Día Universal del Niño , que cada año recuerda la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), tratado internacional de las Naciones Unidas, el más apoyado de la historia, firmado un 20 de noviembre de 1989 por casi todos los países del mundo, excepto Estados Unidos y Sudán del Sur.

El conflicto civil desatado en Siria en el 2011 es una de las situaciones que en los últimos años ha puesto de relieve la deplorable situación que enfrentan los niños en esta parte del mundo.

Antes del inicio de la guerra civil en marzo de 2011, Siria era considerado un país de ingresos medios que velaba adecuadamente por el bienestar de sus ciudadanos.

La crisis en Siria ha dejado más de 470, 000 muertos. Según datos de Unesco , actualmente casi 13, 5 millones de sirios necesitan asistencia y 6, 5 millones de ellos se encuentran desplazados dentro de su propio país, de los cuales la mitad son niños, luchando por sobrevivir y hacer frente a la crisis.

Asimismo, más de 4, 5 millones de personas han huido a países vecinos, un tercio de las cuales son niños y jóvenes en edad escolar. Se estima que 8, 1 millón de niños y jóvenes sirios dentro del país y en los países vecinos necesitan recibir educación y que hay 6 millones de niños sirios que necesitan ayuda humanitaria y más de 2 millones no pueden recibirla, ya que viven en zonas de difícil acceso.

La vida de los niños sirios se han visto sumamente afectada por el conflicto. Cada día se producen numerosas violaciones de sus derechos en los ámbitos de la salud, la educación, la protección, etc.

Ellos están expuestos a la violencia en aumento y a ataques con armas explosivas. Algunos son forzados a convertirse en niños soldado, mientras otros se ven obligados a trabajar para que sus familias puedan salir adelante.En 2014, la ONU reveló que el régimen sirio detenía y torturaba niños.

Miles de ellos han perdido a miembros de sus familias y han tenido que huir de sus hogares, para convertirse así en desplazados dentro de Siria o en países vecinos. Otros han hecho un viaje precario, mucha veces solos, cruzando el mar Mediterráneo para llegar a Europa.

Sin embargo, los niños pueden ser enviados lejos de sus familias a otras partes del país o a países vecinos ya sea para generar ingresos, evitar que sean reclutados o impedir que resulten heridos en el conflicto o evitar que sus hijas sean casadas a temprana edad.

Los niños trabajan en la agricultura, metalurgia, carpintería y restauración, así como en la venta ambulante, el lavado de autos, la recolección de basura o incluso se dedican a mendigar.

Lpero la violencia sexual en contra de hombres, mujeres, niños y niñas ha sido una característica de la guerra civil siria.

La Oficina de la Representante Especial del Secretario General de la ONU sobre la Violencia Sexual en Conflictos (RESG-VSC) afirma que se han registrado casos de violencia sexual basada en el género en detenciones, en puestos de control y en registros domiciliarios en Siria.

Las refugiadas en países vecinos hablan del miedo a las violaciones como factor principal para tomar la decisión de abandonar Siria.

Desde 2014 s eha incrementado el número de casos reportados de violencia sexual perpetrados por grupos terroristas, en particular ISIS (Estado Islámico de Irak y el Levante).

En agosto de 2014, ISIS raptó a cientos de mujeres y niñas yazidíes en Sinyar, en el norte de Irak. Algunas de estas mujeres y niñas fueron llevadas a Siria y vendidas como esclavas sexuales.

Sucede que en Estados Unidos, en algunos estados, se aplica la pena de muerte por hechos cometidos antes de los 18 años, que es algo que prohíbe la convención, y el reconocimiento de ciertos derechos sociales y culturales, especialmente el derecho a la salud que difícilmente encaja con el sistema de seguros privados que tienen en Estados Unidos, explicaron representantes de Unicef.

Asimismo, las autoridades estadounidenses señalan que el tratado le resta el papel de los padres en la crianza de sus hijos y que éste también debilita la soberanía de dicho país.

Paradójicamente con ello, Estados Unidos realizó importantes aportes a la redacción del tratado y le dio forma a varios de sus artículos.

El caso de Sudán del Sur es comprensible, según los expertos en derechos humanos, porque el país se independizó y se incorporó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recién en julio de 2011.