El Congreso comenzó a sesionar con alrededor de una cuarta parte del Gobierno federal cerrado. (Foto: EFE).
El Congreso comenzó a sesionar con alrededor de una cuarta parte del Gobierno federal cerrado. (Foto: EFE).

Los demócratas comenzaron a trabajar para aprobar en la una ley que ponga fin a la paralización parcial del Gobierno que se extiendo por 13 días, e ignoraron la demanda del presidente de 5 mil millones de dólares para construir el muro fronterizo.

Este significa el primer día en que el Gobierno se enfrenta a un Congreso dividido en Washington desde que Trump asumió el cargo en enero de 2017, ya que los demócratas le arrebataron en las últimas elecciones el control de la Cámara de Representantes a los republicanos, que conservaron su mayoría en el Senado.

El Congreso comenzó a sesionar con alrededor de una cuarta parte del Gobierno federal cerrado, lo que afecta a 800.000 empleados, una paralización provocada por la demanda de Trump de fondos para construir el muro a lo largo de la frontera con México, algo que ha sido rechazado con vehemencia por la oposición demócrata.

Los líderes de ambos partidos en el Congreso sostuvieron  conversaciones improductivas con Trump en la Casa Blanca y deberán regresar a la sede del Gobierno este viernes para iniciar otra ronda de diálogos, en una señal de que es probable que el cierre continúe durante el resto de la semana.

Recordemos que la Cámara de Representantes eligió a Nancy Pelosi como su nueva presidenta. La legisladora liberal por San Francisco asume de esta forma por segunda vez uno de los cargos más poderosos de Washington.

El paquete demócrata, dividido en dos partes, incluye un proyecto de ley para financiar el Departamento de Seguridad Nacional en los niveles actuales hasta el 8 de febrero, lo que destinaría 1.300 millones de dólares para vallas fronterizas y 300 millones para otros artículos de seguridad.

La segunda parte financiaría a las otras agencias federales que ahora no cuentan con fondos hasta el 30 de septiembre, el final del actual año fiscal.

Los demócratas dicen que su propuesta les dará a ambas partes un mes para negociar un acuerdo sobre seguridad fronteriza y al mismo tiempo reabrir todas las dependencias del Gobierno.

El líder de la mayoría del Senado, el republicano Mitch McConnell, sostuvo que la legislación demócrata no tiene futuro en el Senado y la calificó de "teatro político, no legislación productiva".

"No perdamos el tiempo", afirmó en el Senado antes de señalar que esa cámara no aprobará ninguna propuesta que no tenga opciones de ser ratificada por Trump.

Los 5.000 millones de dólares que Trump está solicitando cubrirían solo una parte del dinero necesario para construir el muro fronterizo, un proyecto que según estimaciones costaría alrededor de 23.000 millones de dólares.

Trump hizo del muro una promesa clave en su campaña que lo llevó a la presidencia hace dos años, al asegurar que México pagaría por una pared fronteriza que considera necesaria para combatir la inmigración ilegal y el narcotráfico. Los demócratas han calificado el muro de inmoral, ineficaz y medieval.

"No, no. Nada para el muro", dijo Pelosi en una entrevista emitida  en el programa "Today" de la cadena NBC. "Esto envía el mensaje equivocado sobre quiénes somos como país".

Trump, por su parte, acusó los demócratas de intentar juegos políticos. "La paralización solo se debe a las elecciones presidenciales de 2020", escribió el mandatario en Twitter. "Los demócratas saben que no pueden ganar en base a todos los logros de Trump (...) Para ellos, es estrictamente un juego político".

Fuente: Reuters