El Gobierno cubano decretó recientemente feriado por el Viernes Santo con "carácter excepcional" por este año, en consideración a la reciente visita del papa Benedicto XVI.
Con motivo del Viernes Santo, la segunda festividad religiosa que se celebra en la isla luego de la restitución de la Navidad por la visita de Juan Pablo II en 1998, las autoridades cubanas también permitieron la trasnmisión en vivo por televisión de la misa central de la jornada.
"Sin perdón no puede haber relaciones interpersonales sanas, ni vida familiar ni reconciliación entre grupos humanos y pueblos", señaló durante su homilía el cardenal Jaime Ortega, arzobizpo de La Habana.
La pincipal procesión del Vía Crucis se celebrará en la noche en el centro de La Habana Vieja. En otras parroquias, algunas procesiones estaban planeadas en un marco privado debido a las trabas burocráticas.