El Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) restableció hoy un cargo de genocidio contra el exjefe político de los serbios de Bosnia, Radovan Karadzic, anulando una apelación anterior de los magistrados.
Karadzic enfrenta ahora 11 cargos por genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Los magistrados en el proceso de Karadzic, de 68 años, que otrora fuera el más poderoso de los líderes serbios de Bosnia, abandonaron el año pasado uno de los dos cargos de genocidio relativos a su papel en la sangrienta guerra de ese país balcánico (1992-95) en la cual unas 100,000 personas murieron y más de 2,2 millones perdieron sus hogares.
La decisión de hoy no significa que Karadzic sea declarado culpable, pues su proceso continúa, sino simplemente que el cargo figura nuevamente en la lista de inculpaciones sobre las cuales deberán pronunciarse los jueces.
En esa época, los magistrados del juicio en el TPIY con sede en La Haya dijeron que no había pruebas suficientes para apoyar la definición de genocidio en relación con las matanzas cometidas por los serbobosnios en las ciudades y los pueblos de Bosnia de marzo a diciembre de 1992.
Un cargo similar relativo a la masacre de Srebrenica de 1995, donde casi 8,000 hombres y jovencitos musulmanes fueron masacrados y enterrados en fosas comunes, así como otros nueve crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, siguen vigentes.