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Rusia registró en la última jornada por primera vez más de 500 fallecimientos por el coronavirus desde el inicio de la pandemia, lo que supone un nuevo máximo, indicó este miércoles el centro de lucha contra el COVID-19.
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En total fallecieron en las últimas 24 horas 507 personas, lo que eleva el número de decesos por esta enfermedad contagiosa desde marzo pasado a 37.538.
A su vez Rusia notificó 23.675 nuevos contagios en las 85 regiones del país, de los cuales 5.156 o el 21,8 % son asintomáticos.
Tras superar el pasado lunes los 25.000 casos de COVID-19, Rusia ha visto dos días consecutivos mejoras, todo lo contrario que en la cifra de fallecimientos.
En Moscú, epicentro de la pandemia en el país, en las últimas 24 horas se han sumado 4.685 contagios y 75 muertes al balance, en tanto que en San Petersburgo, la segunda ciudad más afectada, se han notificado 3.421 nuevos casos, el máximo desde el inicio de la crisis sanitaria.
De hecho, San Petersburgo ha relevado en esta segunda ola del coronavirus en el ránking de las ciudades y regiones más afectadas a la región de Moscú, donde se han detectado 1.005 nuevos casos en la última jornada.
Rusia suma ya 2,16 millones de casos confirmados de coronavirus y 1,7 millones de pacientes recuperados.
Este martes el gobierno admitió que la situación está complicada, ya que en 32 de las 85 regiones la tasa de incidencia por cada 100.000 habitantes es superior a la media nacional y en seis entidades federadas la ocupación hospitalaria ha llegado a superar el 90 %.
El Ejecutivo ruso ha evitado hasta ahora volver a implantar restricciones a nivel nacional para frenar la pandemia como hiciera durante la primera ola, y ha dejado en manos de las regiones decidir qué medidas tomar en función de la evolución de la situación en sus respectivos territorios.
Fuente: EFE
