Beijing. Un joven médico chino falleció el sábado pasado luego de soportar extensas jornadas de trabajo, dedicado al tratamiento de personas contagiadas con el nuevo coronavirus COVID-19.
El doctor Dong Tian, de 29 años y anestesista de profesión, luchó contra el COVID-19 por 35 días consecutivos hasta que un derrame cerebral acabó con su vida.
El galeno fue declarado muerto en un hospital en Hubei el sábado pasado después de ser tratado en la Unidad de Cuidados Intensivos durante 19 días, según información del diario “Daily Mail”.
Faltaba una semana para que el doctor Dong Tian celebre sus 30 años. En lugar de eso, deja viuda y un padre enfermo, al que cuidaba antes de tomar la decisión de regresar al hospital para batallar contra el coronavirus.
A Dong Tian le dieron descanso el 29 de febrero, aunque lo tuvo que cumplir aislado por haber tenido contacto con personas contagiadas . Ya presentaba señales de cansancio extremo, pero un repentino y potente dolor de cabeza lo dejó sin habla. Tres días después fue llevado de emergencia al hospital de Hubei, donde falleció después de 19 días.
Durante su funeral, el doctor Dong fue aclamado como un héroe en su ciudad natal, Dangyang, en la provincia de Hubei.
“Bienvenido a casa al héroe anti-coronavirus, Dong Tian”, señalaba una pancarta.
El hospital donde trabajaba, el Hospital Popular de Zhijiang, anunció su muerte el 21 de marzo: “El camarada Dong Tian fue eficiente y proactivo en su trabajo. Respetaba a los líderes y era amable con sus colegas”.
La Facultad de Medicina de la Universidad de Hubei, donde Dong estudió, también dedicó elogiosas palabras al galeno por su sacrificio y por ser un destacado representante de los “médicos milenarios". Además, señaló que "usó su vida para expresar su benevolencia y amor como médico. Sacrificó su juventud y pasión por su carrera médica”.
Con China reportando cero casos domésticos por segunda vez consecutiva el viernes, 3.675 trabajadores médicos de toda China pudieron regresar a sus ciudades de origen.