Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Pyongyang. Cada mañana, seis días por semana, grupos de norcoreanas armadas con banderas rojas y tambores toman posiciones en lugares estratégicos de. Su misión: motivar a los trabajadores.

Al son de las canciones patrióticas a la gloria de la República Popular Democrática de Corea [denominación oficial de Corea del Norte] y de su dirigente, Kim Jong-un, agitan sus banderas y tocan sus tambores rojos durante casi una hora.

Están presentes en los principales sitios y lugares de tránsito de la capital, como el hotel Ryugyong. Cada grupo tiene su uniforme, pero todas tienen el mismo equipo y el mismo semblante disciplinado, llevando a cabo una coreografía marcial con el objetivo de incitar a los transeúntes a esforzarse más en el trabajo.

"Hacemos esta propaganda porque queremos hacer feliz al mariscal", explica, en alusión al joven líder norcoreano Kim Chun Hui, una de las participantes, vestida con un abrigo de color coral con los puños y el cuello blancos.

"Animamos a los ciudadanos a obtener grandes logros en su trabajo", señala esta mujer de 47 años, este sábado, tras actuar delante del hotel Ryugyong, una inmensa pirámide que domina la ciudad y que empezó a construirse hace más de 30 años.

Madre de dos hijos, asegura sentirse orgullosa de formar parte de esa comitiva. "No estamos cansados, consideramos esto como un gran orgullo y como lo que tenemos que hacer".

— "Batalla de los 70 días" —

Los norcoreanos entrevistados en la calle suelen hacer gala, cuando el interlocutor es un medio extranjero, de su lealtad total hacia las autoridades de Pyongyang.

Estas representaciones surgieron a raíz de dos campañas decretadas en 2016 para aumentar la producción, la "batalla de los 70 días" y la "batalla de los 200 días", con el fin de paliar el efecto de las sanciones económicas impuestas por la comunidad internacional a causa de los programas balístico y nuclear norcoreanos.

Unas "batallas" que terminaron hace bastante tiempo, aunque estas representaciones [que oficialmente se llaman "Actividad de agitación de los miembros de la Unión de Mujeres Socialistas a hora punta"] siguen realizándose seis días por semana.

La Unión de Mujeres Socialistas es un órgano oficial a través del cual el régimen organiza la vida de las amas de casa. Todas las mujeres no activas son miembros, en general desde que están en la treintena hasta que alcanzan los 60 años.

A las mujeres de una veintena de años se les suele asignar un trabajo, que muchas dejan cuando se casan y tienen hijos.

"Consideramos al líder supremo como nuestro padre", afirma Song Yang Ran, de 57 años, jefa de la Unión de las Mujeres Socialistas en el distrito de Pothonggang, en el centro de la capital. "Eso siempre será así".

Fuente: AFP